* A jalones fue detenida Michelle Romero, quien posteriormente fue entregada a personal de la Comisión de Derechos Humanos.
Puebla, Pue.- Con gas lacrimógeno y chorros de agua, en reiteradas ocasiones lanzados directamente a la cara, respondieron policías de Puebla capital a mujeres, principalmente jóvenes, que participaron en las marchas conmemorativas al Día de la Mujer y que lograron retirar momentáneamente parte de las vallas colocadas frente al palacio municipal. Además, a jalones fue detenida Michelle Romero, quien posteriormente fue entregada a personal de la Comisión de Derechos Humanos.
En el zócalo de la ciudad capital, alrededor de las 5 de la tarde coincidieron dos manifestaciones: la organizada por el Frente Feminista Radical, Morras Sororas y Ajolotas Revolucionarias, y la de universitarias de la UAP, Ibero y Upaep.
Fue en este último donde la situación se tornó más violenta, ya que los policías que permanecían atrás de las vallas respondieron con chorros de agua y gases lacrimógenos y de otros tipos no identificados, de color blanco, azul y mostaza, a las jóvenes que golpearon hasta retirar una fracción de las estructuras. Cabe decir que también se infiltraron hombres que quisieron derribar las mismas.
Las manifestantes también lanzaron huevos, botellas de plástico y de vidrio, entre otros artículos; también lograron romper algunos vidrios del recinto municipal.
Minutos después de las 18 horas, algunos policías se apostaron en la 2 norte y Juan de Palafox y Mendoza, uno de los oficiales que estaba al frente exclamó: “vamos a encapsularlas”, y acto seguido se dirigieron a la esquina de la plancha del zócalo, la de la 2 sur, donde hubo un primer intento de detener a una de las manifestantes, sin embargo, las mujeres lo impidieron.
Algunos uniformados municipales portaron extinguidores con los cuales dispararon en reiteradas ocasiones.
Cabe decir que los policías también intentaron llevarse al reportero Israel Flores, pero compañeros del gremio lograron liberarlo; además de que varios representantes de medios de comunicación también fueron mojados con el agua y gaseados, pese a mostrar sus acreditaciones.
Posteriormente, dos filas de agentes de la Secretaría de Seguridad Ciudadana del municipio de Puebla se instalaron frente a las vallas y ahí permanecieron, en tanto las manifestantes lamentaron que se cuiden más los inmuebles que a las mujeres, a la par que continuaron lanzándoles objetos e insultos.
A las 18:34 de la tarde más policías arribaron al zócalo, pero para cuidar la fuente de San Miguel, donde feministas del bloque negro lograron quitar gran parte de la estructura metálica, aunque ya no pudieron retirar otra más, en forma de caja, que también fue mandada a poner por el gobierno municipal.
En tanto algunas más lograron ingresar al atrio de la catedral, del lado de la 5 Oriente, pero fueron sacadas casi de manera inmediata.
Alrededor de las 7 de la noche, las mujeres que permanecían frente al palacio comenzaron a retirarse y se dirigieron a la referida fuente, donde entonaron canciones feministas.
“¡Agarraron a una!”, exclamó alguien a la distancia, de inmediato todas se dirigieron a hasta donde un grupo de policías sujetaban a una joven de nombre Michelle Romero y a jalones se la llevaron a un sitio que no fue revelado.
Decenas de manifestantes intentaron liberarla, pero los policías lograron llevársela lanzando de nueva cuenta gases con extinguidores.
Pese a que un grupo de manifestantes intentó seguir a los elementos policíacos que retuvieron a Michelle, uniformados les cortaron el paso a la altura de la 2 sur y Juan de Palafox y Mendoza.
El ayuntamiento argumentó que supuestamente fue detenida por agredir a un agente de tránsito, pero una amiga de Michelle, que logró escapar, comentó que ellas estaban protestando pacíficamente, pero abruptamente fueron abordadas por los policías para detenerlas.
CON TENDEDERO EXHIBEN A VIOLENTADORES
Con la participación de miles de mujeres se llevó a cabo la marcha de organizada por el Frente Feminista Radical, que partió de la Fiscalía General del Estado y llegó al zócalo de la ciudad de Puebla.
El contingente estuvo encabezado por madres víctimas de violencia vicaria y familiares de mujeres desaparecidas y de algunas que fueron localizadas, pero sin vida.
Otras mamás estuvieron acompañadas de sus hijas e hijos, desde meses de edad hasta jóvenes; no hubo limitantes para las asistentes, ya que algunas incluso fueron en sillas de ruedas.
En la protesta hubo un tendedero con el cual se exhibieron los nombres y rostros de violentadores, acosadores, feminicidas y deudores alimentarios, entre otros.
En el trayecto, varias llevaron alimentos y agua para compartir, además de que se cuidaron mutuamente.
Al arribar a la avenida Juan de Palafox, frente a una iglesia, católicas realizaron una valla humana para recibir a las asistentes a la marcha; indicaron empatizar con las consignas, pero acotaron que no están a favor del aborto ni de pintar inmuebles.
Cuadras más adelante, un grupo de trabajadoras de una tienda de ropa, que no pudieron participar precisamente por estar laborando, se solidarizaron mostrando una bandera y gorras púrpura.
En el paso de la marcha por el Congreso del Estado no se registraron altercados, uniformados estatales cuidaron la fachada del recinto legislativo.
En tanto, en la plancha del zócalo también se pudo observar una ofrenda realizada por Chicas de la 14 A. C., en exigencia de que se respete y reconozca el trabajo de las sexoservidoras.
